Sweeney Todd, el barbero demoníaco

Anoche fuimos con Facu y Moni a ver Sweeney Todd. Dirección de Tim Burton. Actuaciones estelares de Johnny Depp y Helena Bonham Carter. ¿Qué más se puede pedir para que una película sea buenísima? Este trío me encanta, y esta peli no hace más que confirmarlo.

No es una película para cualquiera... es de Tim Burton, y encima es un musical. :)

Me gustó mucho como adaptaron el musical al cine, y me sorprendieron positivamente Johnny y Helena como cantantes. Ok, no digo que puedan dedicarse a cantar, pero digo, cantan lo suficientemente bien (o no mal) para salir bien parados en esta empresa.

Buller + Implementamos, versión 2.0

El título del post es una referencia a esta cervezeada, y a este hito.

Anoche nos juntamos a cervezear y festejar, esta vez matando dos pájaros de un tiro, la implementación de la fase 2 del proyecto en el que estuvimos trabajando durante todo el año pasado. Que es un éxito, porque somos grossos. Sépanlo. :)

Como siempre, muy buenas las cervezas artesanales. Esta vez no innové mucho... fuí a por la Honey Beer en todas las rondas. Pero además de las clásicas "Papas Buller" y el pan de pizza, le entramos a los nachos y las fajitas. Muy buenas!

El equipo, en Buller

Fotos del evento, cortesía de Seba, acá.

Antes de Partir

Ayer fuimos con Facu & Moni a ver Antes de Partir (The Bucket List).

Muy buena película. Freeman y Nicholson son dos actorazos; especialmente este último nunca deja de sorprenderme en cuanto a su expresividad, en cuanto a todo lo que logra transmitir con tan poco (una mirada, un mínimo gesto). La historia podría ser un dramón de aquellos, pero tiene un muy buen ritmo, y una buena mezla con suficientes situaciones graciosas como para que no nos olvidemos que, después de todo, estamos en el cine tratando de pasar un rato agradable. Los contrapuntos entre Edward (Nicholson) y Thomas, su asistente (Hayes) aportan mucho al respecto.

Yo me emocioné bastante, especialmente al final. La peli transmite un montón de mensajes piolas; no se si son novedosos o no, creibles o no, "trillados" o no, pero están muy bien transmitidos. Esta aclaración la hago porque justo un rato antes de ir al cine leí con la profe de inglés un review de la película en el Buenos Aires Herald, y el crítico aparentemente jamás pudo ver más allá de si la situación que da pie al film es creíble o no. Me parece que eso es quedarse muy corto... y hay que ser de piedra para no poder expersar alguna otra cosa sobre esta peli luego de verla... en fin. Críticos.

Después del cine, nos fuimos a La Casa del Queso; la idea fija era tomar cerveza artesanal (ya la habíamos probado el anteaño pasado, cuando hicimos una reunión de PyAr allí) y picar algo. Pero finalmente en lugar de entrarles a las picadas y a las tapas, terminamos eligiendo platos "posta". Muy buena cocina.

Haciendo que Ubuntu 7.10 se despierte bien

Hacía rato que tenía problemas con Ubuntu en la laptop con el soporte de "Suspend to RAM".

Suspender, suspendía. El problema era al despertar. Pasaban 3 cosas:

  • La pantalla no se encendía.
  • Me quedaba sin sonido. El control de volumen maestro quedaba silenciado, y además, se bajaba completamente el volumen PCM.
  • Me quedaba sin wifi. Mal. El dispositivo desaparecía, el led de la laptop quedaba apagado y no respondía a la combinación de teclas Fn+F2 para encenderlo, y NetworkManager determinaba que estaba solo en el mundo, sin ningún dispositivo que atender.

Lo de la pantalla tenía un workarround: apretar CTRL-ALT-F1 y luego ALT-F7, o sea, conmutar a modo texto y volver a modo gráfico. Eso terminaba de despertar al video. Feo, pero eran dos golpes de tecla.

El tema del sonido, también tenía un workarround: Des-silenciar el master, abrir el control de volumen, y volver a subir el volumen PCM. Me hinchaba las pelotas, sí, pero se arreglaba con algunos clics del mouse.

El tema de la red wifi tenía un workarround HORRIBLE: reiniciar :(

Hace unos días me puse a investigar más a fondo. El objetivo primario era hacer que funcione ok (i.e., que al despertar la laptop tuviera red otra vez automáticamente); el premio consuelo que estaba dispuesto a aceptar era encontrar que servicios reiniciar (y en que orden) para que volviera a funcionar, y al menos no caer en reiniciar la máquina (que es la salida típica en Windows, pero NO en Linux).

Después de googlear bastante, la primera conclusión a la que llegué es que todo "debería" funcionar bien; los problemas que estaba experimentando eran típicos de hace un par de versiones atrás, pero no de Ubuntu 7.10. Si bien no era el único que tenía estos problemas, también era mucha la gente que reportaba que todo le funcionaba perfecto "out of the box".

¿Entonces? Empecé a bucear en decenas de bug reports y threads en foros y demás, probando tocar un archivo u otro (casi siempre, /etc/default/acpi-support), para comentar una línea o descomentar otra, o cambiar cierto parámetro... pero nada. El tema no se arreglabla. Finalmente, terminé encontrando un post en un foro donde un usuario daba la siguiente receta, al iniciar luego de un suspend:

  • parar el servicio de networking;
  • parar NetworkManager;
  • forzar la descarga del módulo del kernel correspondiente a tu placa wifi (en mi caso, ipw3945);
  • volver a cargar el módulo;
  • iniciar networking;
  • iniciar NetworkManager;

Voilá!. Andaba. Y era suficientemente sencillo como para armar un pequeño script que automatizara eso, cosa que terminé haciendo. Cada vez que la laptop salía de un suspend, corría el script, y volvía a tener red. Además, claro, tenía que seguir despertando "a mano" el video y el sonido. Feo. Pero ya había dado un paso: No reiniciar.

Pero todo esto me dejó pensando... si todo se limitaba a reiniciar servicios, ¿entonces por qué no andaba? ¿Por qué hay N personas a las que no les andaba, y M personas a las que sí? Y entonces empecé a confirmar la sospecha de que al fin y al cabo todo era producto de los upgrades sucesivos de una versión de Ubuntu a la siguiente. Este tema (el power management) hace un año y pico atrás tenía problemas. Ahora estaban resueltos. Pero probablemente algo (vaya uno a saber qué...) no había sido correctamente pisado, reconfigurado o reemplazado en alguno de los upgrades, y por eso me seguía funcionando a medias.

Y decidí probar lo siguiente: La mayoría de las recetas para arreglar estos problemas implicaban modificar el archivo /etc/default/acpi-support. ¿Qué pasaría si eliminara COMPLETAMENTE (incluyendo la configuración) el paquete "dueño" de ese archivo, y lo reinstalara?

Ejecuté un

$ dpkg -S /etc/default/acpi-support

y me enteré que el archivo es parte del paquete acpi-support. Probé desinstalarlo, y APT me dijo "no! no podés desinstalar eso, porque el paquete powermanagement-interface depende de acpi-support". Igual, decidí forzar la desinstalación ignorando las dependencias (total, pretendía reinstalarlo inmediatamente después, con lo cual no iba a quedar nada roto), pero ya que estaba metí en el trámite también a ese otro paquete:

$ sudo dpkg --purge --force-depends acpi-support
$ sudo dpkg --purge --force-depends powermanagement-interface

Listo. Con el --purge me aseguraba de haber eliminado también toooooodos los archivos de configuración, y que por lo tanto al reinstalarlos, se configurara todo de cero. A reinstalar:

$ sudo aptitude install acpi-support powermanagement-interface

Y listo! ¿Adivinen qué? Ahora anda todo 100% Ok. La laptop suspende perfecto, y se despierta perfecto, con video, sonido y wifi.

Algunas moralejas de esta historia:

  • Por maravilloso que sea actualizar el sistema operativo "on the fly", de una versión a otra, es muy complicado que el proceso cubra el 100% de los detalles. Y esto se potencia cuando las actualizaciones se acumulan (yo ya voy por el 3er upgrade, y en un par de meses sale Hardy, e iremos por el 4to...)
  • Si algo no te anda, y a otras personas sí, y tu instalación no fue hecha desde cero, empezá a sospechar de que algo haya quedado mal por ese lado.
  • Si empezás a tocar acá y allá, y no obtenés resultados, y a la larga lo que estás buscando es la configuración "por defecto" en la que todo debería andar, empezá a preguntarte si no es mejor purgar completamente el componente de software en cuestión, y reinstalarlo para que se autoconfigure solito.
  • APT (el sistema de paquetes) es una joyita. Es fantástico poder llegar de un archivo a un paquete, poder desinstalarlo COMPLETAMENTE, incluyendo a la configuración, y que la reinstalación se ocupe de auto-configurar todo nuevamente.
  • Linux es fantástico por su modularización, y por permitir estas cosas. Ok, en un mundo ideal esto no debería pasar, y tampoco la solución es para cualquiera (no la veo a mi vieja por ejemplo siguiendo estos pasos), pero una vez ante el problema, prefiero mil veces lidiar con algo así en Linux, al que le puedo preguntar donde le duele (¡y me responde y todo!), que en Windows, donde no queda otra que recurrir a la magia negra... o reinstalar TODO, ABSOLUTAMENTE TODO.

A partir de ahora, los comentarios están moderados

Actualización febrero/2011, 3 años después de haber prendido la moderación, migré a WordPress y empecé a gestionar los comentarios con DISQUS. El procedimiento de moderación no es exactamente igual al que se describe acá, pero básicamente, me sigo reservando el derecho de usar las herramientas de DISQUS para eventualmente borrar algún comentario (o marcarlo como spam).

No hay mucha gente que comenta mis posts. Hay algunos "comentaristas" regulares: Facu, Darío, Diego C., Diana... creo que ellos representan el 90% de los comentarios en la historia de este blog.

De cada 100 comentarios que se realizan,  el 99% es efectuado por un spammer, de manera automática, y es marcado como spam, y no llega a verse.

Pero últimamente, me cansé de ciertos visitantes circunstanciales, que llegan a algún post del blog a través de Google, y terminan escribiendo alguna gilada, encima la mayoría de las veces con la redacción típica de un SMS de un quinceañero, y cuando es para discrepar con mis opiniones, para completarla, escriben faltandome el respeto.

Me encanta poder comentar en los blogs de otra gente, y que la gente comente en mi blog. Y no me gusta estar censurando y poniendo trabas a la gente que quiere opinar. Pero lamentablemente vivimos en una sociedad que en general piensa que expresar su opinión en el espacio personal de otro es un derecho. Y yo no estoy de acuerdo. Es un privilegio. Así que no podés ir por la vida pretendiendo opinar de la forma que quieras en el espacio personal de cualquiera. Para eso... ¡abrí tu propio blog!

Conclusión: Estoy probando un plug-in para moderar los comentarios antes de que sean publicados. Aparentemente está funcionando correctamente, así que va a quedarse (y si no funciona, pretendo arreglarlo, buscar otro, o escribirme uno).

A todas aquellas personas que regularmente leen y comentan en este espacio, les prometo que voy a hacer todo lo posible por ocuparme de la moderación de comentarios al menos una vez al día, de manera que no haya demasiado delay entre que escriben algo y queda publicado.

El form de envío de comentarios fue modificado incluyendo al pie un par de párrafos detallando aquellas cosas que SEGURO son motivo de rechazo, en particular si no conozco a la persona que está escribiendo el comentario.

Espero sinceramente que para mis amigos esto no sea una traba; y para el resto, es una forma de blanquear un poco más el hecho de que lo que no me gusta no es publicado. Y me parece mejor hacerlo así, avisando de antemano las reglas, que borrando el comentario una vez que apareció en el artículo y la página principal (como ya he tenido que hacer varias veces).

Fiaca en Bariloche

Luego de las emociones de la semana anterior, los días de vacaciones que disfruté en Bariloche fueron muuuuuuy tranquilos.

Me quedé en casa de Sandra, a la altura del km 13 de la Bustillo, en un barrio de las afueras muy lindo. Las actividades fueron dormir, comer, dormir siesta, caminar un poco, pasear por el centro, y hasta ver tele. San me malcrió una semana entera con espectaculares desayunos y meriendas (al menos comparados con mis pobres desayunos, y mis no-existentes meriendas, eran espectaculares).

Al centro fui varias veces (sí, desde el km 13 y en bondi es casi una excursión...), y aproveché para caminarlo bastante. Hacía muchísimo tiempo que no estaba en Bariloche más de unas horas, y que no lo caminaba. Impresionante la cantidad de turistas (nacionales y extranjeros); está absolutamente DESBORDADO en capacidad e infraestructura en un montón de servicios. Está todo carísimo, mal.

Las excursiones más "locas" fueron ir hasta el Llao Llao, pasear por las afueras del hotel y hacer un tekking de más o menos 1h por un sendero que parte de ahí y lleva hasta el lago Escondido por un sendero muy tranqui y bonito, que incluye un bosquesito de arrayanes. También ir hasta el cerro Campanario, pasear en su aerosilla, y disfrutar de la vista (y la confitería...) de la cumbre. Y presenciar en el centro, a orillas del Nahuel Huapi, la final de la competencia de windsurf y kaiser.

Me junté un par de veces con Pablo. La primera vez, una tarde a tomar unas cervezas artesanales en La Cruz, con un amigo de él (Ernesto), acompañadas de nachos, tacos y tortillas. La segunda vez cenamos en su casa, así que también pude compartir un rato con Denise y Santi. Impresionante como creció Santi... como pegó un estirón en el último año, como conversa. De postre comimos un rico helado de Jauja (je, ¿de dónde más?), ritual que dicho sea de paso repetí cada vez que fui al centro.

Hubiera estado bueno compartir un poco más de tiempo con Pablo y Denise, pero fueron pocos días, y en la semana ellos estaban trabajando, no de vacaciones al pedo como yo, y se complicó.

En definitiva, fue una semana de relax y de vivir Bariloche, un poco como turista fiacoso, y otro poco casi casi como si fuera un residente.

Fotos, acá.

Por el valle del Turbio

También conocido como "Las Cuatro Estaciones". ;)

¿Quién hubiera pensado que en un trekking corto (6 días), en una zona relativamente baja (valle del Turbio), en pleno verano, disfrutaríamos y sufriríamos sol, lluvia, calor, frío, viento... y hasta 30cm de nieve?

El Bolsón (y alrededores) tiene sorpresas para todos los gustos. Eso es lo que más destaco de la travesía que hice desde lago Puelo hasta el cerro Plataforma, por el valle del río Turbio. A pesar del frío y el agua, fue fantástico poder caminar por un bosque nevado, mientras está nevando. Y nevado en serio. Ya había estado en la nieve, pero el paisaje esta vez fue pseudo-invernal, y en invierno NUNCA estuve en el sur, así que este fue un regalo atípico de la Naturaleza (que tengo entendido fue noticia hasta en Buenos Aires), quizás para compensar que mientras estuvimos acampando al pie del Plataforma, buena parte del tiempo estuvo nublado y lluvioso, y a pesar de que subimos y le hicimos el aguante al viento y al frío un par de horas con la esperanza de que despeje... no hubo cumbre, y no hubo (ahí, arriba del Plataforma) mucho paisaje para apreciar.

El otro punto saliente fue el grupo. No porque otros grupos hayan sido malos, ni mucho menos, sino porque conocía prácticamente a todos de trekkings anteriores. Algo inusual. Eso hace que el grupo funcione de una; no hay nombres que recordar, no hay hielo que quebrar, muchas preguntas ya están respondidas... y solo queda divertirse y pasarla bien desde el vamos.

IMGP3313.JPG

El trekking consistió en ir desde la margen sur del lago Puelo hasta la base del Plataforma, faldeando el cerro Cubridor, y siempre siguiendo el valle del río Turbio. Los paisajes son muy lindos, especialmente desde los lugares elevados. El río Turbio tiene ese color azul-turquesa lechoso típico de los glaciares, ya que arrastra sedimentos de estos. De ahí su nombre. Y en el trayecto pudimos apreciar muy lindas vistas del Puelo, de El Bolsón, del Plataforma y del cerro Tres Picos.

IMGP3184.JPG IMGP3197.JPG

Un punto saliente del paisaje son los bosques incendiados :( Es muy triste. En los últimos 100 años, la zona sufrió 3 incendios forestales muy grandes. A pesar de que el bosque hace todo lo que puede por resurgir, el efecto negativo de los incendios es acumulativo... y hay zonas completamente peladas, con tierra, arbustos, y árboles quemados. Arboles en muchos casos centenarios. Y como siempre, la causa del incendio es humana. Tal vez no intencional... pero humana.

IMGP3213.JPG IMGP3225.JPG

Acampamos 3 noches en la base del Plataforma. El segundo día de trekking, cuando nos dirigíamos a la base, estuvo bastante frío y lluvioso. La primer noche lloviznó un poquito; al día siguiente estuvo un poco mejor, y algunos aprovechamos para hacer un mini-trekking hacia el cerro, como para tener un preview de lo que sería el ascenso al otro día, si el clima mejoraba.

IMGP3253.JPG IMGP3244.JPG

La segunda noche diluvió. Al día siguiente, amaneció casi despejado, así que a media mañana se decidió intentar subir al Plataforma. Pero a medida que subíamos... el solcito resultó ser un "claro" en el ojo de la tormenta, que empezó a volver. Se empezó a nublar, y a nublar, y a lloviznar... y más arriba viento, y más viento, y agua nieve... y aguantamos un rato refugiados en unas rocas... pero al final nos ganó el frío. Realmente no valía la pena seguir subiendo, ya que solo íbamos a ver el interior de una nube :) Lástima, porque nos quedamos con ganas de ver las lagunitas de altura del Plataforma, y acercarnos más a sus múltiples cascadas, y ver el paisaje del valle desde su cima.

IMGP3267.JPG IMGP3269.JPG

Bajamos del Plataforma con frío y empapados, y terminamos refugiados en las carpas hasta la hora de la cena, gracias al heroico esfuerzo de Luis y Fernan, nuestros guías, que se quedaron a capear el frío, la lluvia y el granizo cuidando el fuego... y cocinando.

IMGP3275.JPG

A la hora de la cena hacía mucho frío, pero por lo menos no llovía. Al rato, empezó a caer ese granizo finito típico de cuando hace más frío del necesario para que nieve. Y después, empezó a nevar muy poquito, pero lo suficiente para blanquear el paisaje y jugar un rato. Vencidos por el frío, nos fuimos a dormir.

IMGP3284.JPG IMGP3285.JPG

Durante la noche... nevó. Pero posta. Nieve. Mal. De verdad. Al salir de la carpa estábamos inmersos en un paisaje invernal. Parecía agosto. Parecía que se había dado una jugarreta rara con el tiempo, y habíamos permanecido en la carpa todo el verano. Impresionante.

IMGP3309.JPG

Desarmamos el campamento a los pedos, mientras aún nevaba, con los dedos congelados. Y emprendimos el retorno, pisando 20 / 30 cm de nieve mientras caminábamos por el bosque. Para mí, toda una novedad, así que toda esa mañana de trekking la disfruté un montón. Caminar por un bosque nevado es caminar como por un libro de cuentos. Sí, ya se, es medio naïve lo que digo. Pero es la sensación que me dió.

IMGP3311.JPG IMGP3314.JPG

El regreso fue duro, no tanto por el terreno (aunque se complicó con la nieve), sino porque teníamos que desandar en un día lo que a la ida habíamos hecho en dos. A mediodía, cuando ya estábamos bastante más abajo y habíamos dejado la nieve, otra vez empezó a llover. El timming no podría haber sido mejor: Justo estábamos llegando al refugio temporario que se está montando mientras se reconstruye el que se quemó más arriba. Y ¿Emanuel? (el refugiero) nos convidó unos ricos mates con torta fritas, lo cual nos pemitió pasar el rato calentitos mientras dejaba de llover, y nos brindó el combustible para seguir la marcha.

IMGP3319.JPG

A media tarde llegamos al puesto en el que habíamos acampado el primer día. Y... ¡había SOL! Rápidamente transformamos el campo en un tendal con todas nuestras cosas mojadas, y disfrutamos de un almuerzo tardío mientras nos secábamos.

IMGP3322.JPG

Después de un break de más de 2hs, continuamos la marcha rumbo al Puelo. Al rato, nos dividimos, un poco sin querer, un poco porque Charly, Sil y yo empezamos a meter pata y a seguir a los caballos de los paisa que porteaban parte del equipo y que llevaban a Luisito, que se había fisurado a la mañana caminando por la nieve, y a partir de que llegamos al refugio había continuado a caballo. El asunto es que por seguir a los caballos le sacamos ventaja al resto del grupo, nos mandamos sin saber por otro camino (moraleja: Los caballos NO siguen normalmente la misma ruta que siguen las personas...) más largo, terminamos perdiendo de vista a los caballos (moraleja 2: por muy rápido que camines, los caballos caminan MAS rápido), empezamos a seguir sus huellas, y medio que nos perdimos... y cuando empezamos a decir los tres "oh oh... nos mandamos un moco", apareció Fernan que nos venía siguiendo las huellas. Cuestión que a pesar del moco y el desvío, ya con la ayuda de Fernan terminamos llegando al lago antes que el resto del grupo, que supuestamente venía por el camino más corto. Es que veníamos a las chapas, mal, y las últimas 3hs de trekking las hicimos prácticamente sin parar.

El último campamento, a orillas del Puelo pasó sin novedades (¿que no haya llovido es novedad? :p), y al día siguiente, después de despedirnos de Luisito, Pau y Raúl (que por distintos motivos, se fueron directamente en lancha), emprendimos la marcha por la orilla del lago hasta llegar al "Desemboque", donde nos tenía que esperar el vehículo que nos llevaría otra vez al hostel en El Bolsón. El camino se hizo realmente muuuuuuy largo, porque ya estábamos muy cansados. Pero llegamos. La combi nos dejó pagando, así que después de refrescarnos en el Puelo, tuvimos que volver en remis.

IMGP3331.JPG IMGP3328.JPG IMGP3346.JPG

Finalmente llegamos a Gaia, el hostel en El Bolsón. Mientras esperábamos que se hiciera el asado, y después de darnos una hermoooooosa ducha y ponernos presentables, nos hicimos un rato para bajar hasta el pueblo, y, al igual que la noche que llegamos desde Baires, tomarnos unas cervezas artesanales y un buen helado en Jauja. Y después, otra vez al hostel, a comer el asado (si, arrancamos por el postre, ¿y qué?), que estuvo espectacular.

Ese fue el punto final de la travesía. Al día siguiente partimos todos para Bariloche; de ahí, algunos se iban a San Martín de los Andes a hacer otra travesía, otros regresaban a Baires, y yo, iniciaba mi segunda semana de vacaciones, haciendo turismo urbano por Bariloche. Pero eso... eso es otra historia.

Todas las fotos de la travesía, acá.

Ah, me olvidaba, ¿alguien sabe cuánto cuesta un fagot? (perdón, chiste interno...)

Beowulf

Fuí a ver Beowulf.

No me gustó. Me entretuvo un rato... hasta ahí. De un poco más de la mitad en adelante, solo quería que terminara.

Como animación digital... sí, está buena, pero no me pareció un gran avance sobre Final Fantasy, y en el medio han transcurrido como 7 años. La animación de las personas me resultó muy poco natural. Prácticamente TODO el tiempo, a excepción de los rostros...

... lo que lleva al punto más novedoso (y fuerte) de la peli, que fue esto de capturar a los actores reales, y luego digitalizarlos. Con eso se ganó mucho en la expresividad facial. Pero a mi me generó un problema adicional: Beowulf me resultó muy poco creíble. Todo el tiempo escuchaba la voz de Ray Winstone, y no podía dejar de verlo como es: el gordito cincuentón que hace del investigador Vincent Gallagher en la mini-serie Vincent. Y nunca pude conciliar la voz y la cara de Ray Winstone con el personaje de Beowulf. En ese sentido, Angelina Jolie y Anthony Hopkins están muchísimo más creíbles en la animación.

Y la historia, me resultó muuuuuuuuy chata. Creo que había muchos más ribetes para explotar en los personajes y en los detalles, y todo el presupuesto se fué en hacer muchos efectos, y no en contar una buena historia (sí, ya se, una cosa no excluye a la otra, pero esto no es Terminator II, ni Jurassic Park, ni El Señor de los Anillos...)

Cualquiera que lea normalmente mis críticas de cine sabe que no tengo NINGUN problema con la fantasía, las animaciones, la magia, los comics y las super-producciones. Pero por algún motivo, Beowulf estuvo muy muy muy por debajo de mis expectativas.

Next

En estos días terminé de leer Next, de Michael Crichton. Me gusta mucho como escribe este autor; en general investiga bastante, y la ciencia ficción que hace es bastante real. En algunas historias se toma más licencias que en otras... pero casi siempre, escribe sobre cosas que podrían estar pasando, o podrían pasar en breve.

"Next" le da una vuelta de tuerca más a ese estilo. Es una exploración de diferentes escenarios relacionados con las terapias genéticas, el pantentamiento de genes, la industria farmacéutica, el dinero que hay en juego, y los problemas éticos, morales y jurídicos que giran alrededor de esta rama de la ciencia. El libro es extraño porque no tiene una estructura de intro, nudo, desenlace. Es una serie de historias que se entrecruzan, algunas más que otras. No todas "se cierran" al final. El final es bastante abierto. Es como espiar un rato que hay atrás de la genética hoy en día (o que habrá en breve, si seguimos transitando algunos caminos); incluso el relato está salpicado de extractos periodísticos... y lo terrible es que varios SON REALES. Después, varios de los experimentos que se mencionan en el libro son, evidentemente, ciencia ficción. Pero HOY. Mañana... mañana tal vez no. Porque la base científica para realizarlo está (o casi, y falta un empujoncito, o alguien con menos escrúpulos, o alguna mejora tecnológica).

Al final del libro Crichton esboza algunas conclusiones a las que llegó mientras investigaba para escribir la novela. Hay una EXTENSA bibliografía, bastante comentada por él, incluso con recomendaciones de libros que uno podría comprar y leer para empaparse sobre genética sin ser médico, biólogo, bioquímico, etc. Siendo un mero mortal :)

Sobre las conclusiones puedo hablar sin riesgo a incurrir en un "spoiler" (ya que bien podrían leerse antes de la novela). La principal, es que el patentamiento de genes (algo que ocurre hoy día, mínimo en yankeelandia) es una aberración. Es muy interesante el planteo de Crichton al respecto, y el razonamiento que hace para mostrar que por más que la excusa de patentar un gen es proteger a un investigador / Universidad / laboratorio con la exclusividad de su descubrimiento, lo único que logran es TRABAR la competencia y ENTORPECER que se pueda construir más conocimiento sobre eso.

Es muy fácil hacer un paralelo con las patentes de software. Ahora, con los genes es aún más descabellado... es impresionante que se pueda patentar un gen. Un gen no se "inventa". Se descubre. Es algo natural, es un hecho de la naturaleza. Está ahí. Que la oficina de patentes de USA otorgue patentes sobre eso es tan ridículo como otorgar una patente sobre el sol, el agua, o la luna. Una cosa sería patentar una terapia genética, un tratamiento, un fármaco que actúa sobre determinado gen, pero otra cosa es patentar un gen en sí. Y sin embargo, se patenta. Hoy. Mientras leés esto.

Me hubiera gustado que el autor explore un poco más como es el tema en el resto del mundo, y que la novela deje de mirar un poco el ombligo de USA. Muchas de las problemáticas y situaciones que se mencionan son específicas de EE.UU., y si bien podría ser igual en otros lugares del mundo, no queda claro si es así o no. Pero bueno, en definitiva, el tipo está escribiendo una novela de ficción... y que esté basada en algo real (o casi), no significa que haya tampoco que tomarlo al pie de la letra, o como base para decir "en USA se hace esto, vamos a ver como es en Europa", por ejemplo. Pero los conflictos más neurálgicos, las bases del relato son bastante reales, y creo que el texto sería aún más rico si no se centrara tanto en EE.UU.